Willie Gonzalez No Es Casualidad Letra
Willie Gonzalez No Es Casualidad Letra
Siempre cada encuentro
Parece el primero
Que desata el fuego que estaba
Preso en el corazon
Y entre beso y beso
Me aferro a tu cuerpo
Me hago dueño de tus secretos
De tu calor de toda tu alma
No es casualidad que tu y yo nos encontremos
no es casual
Los dos buscamos eso, eso, eso
No es dificil ver e imaginar nuestros deseos
No es dificil saber lo que queremos
es, eso, eso, eso
Cuando te acercas yo me estremezco
tus labios tiemblan
yo te deseo
y entre tus brazos me siendo
en medio de un incendio
siempre cada encuentro
parece el primero
se desata el fuego que
ue estaba preso en el corazón
me aferro a tu cuerpo
y me hago dueño de tus secretos
de tu calor
de toda tu alma
No es casualidad que tu y yo nos encontremos
No es casual
los dos buscamos eso, eso, eso, eso
Yo no se pensar ni respirar
si no es contigo
Yo no se de ti me he vuelto adicto
eso, eso, eso, eso
cuando te acercas
yo me estremezco
tus labios tiemblan
yo te deseo
y entre tus brazo me siento
en medio de un incendio
Siempre cada encuentro parece el primero
se desata el fuego
que estaba preso en el corazón
y entre beso y beso
me aferro a tu cuerpo
y me hago el dueño de tus secretos, de tu calor
de toda tu alma
Cada encuentro parece el primero...
se desata el juego sin ropas
los nuestro es tan extrovertido
Cada encuentro parece el primero...
una caja nena de sorpresas somos tu y yo
Cada encuentro parece el primero.
de ondulantes posiciones
todo es nuevo en el amor
Cada encuentro parece el primero...
coincidimos en el momento oportuno
cuando termiamos
Cada encuentro parece el primero.
Y vuelvo a rosar mis labios por tu piel
se enciende el fuego
que calor.!
Cada encuentro parece el primero.
Charlamos reimos gozamos
haciendo eso
Cada encuentro parece el primero...
Con tu cuerpo debajo del mio
y dame tu amor y dame tu amor... asi
Cada encuentro parece el primero
Tu manera de ser tus encantos sin fin
son las cosas que me hacen amarte asi
Cada encuentro parece el primero
Soy adicto de amor
de la entrega de tu cuerpo
Siempre cada encuentro parece el primero
se desata el fuego que estaba preso en el corazón(2V)